Esta novela cuenta la historia de Ana, Laura y Martina. Amigas de la infancia, el destino las separó a partir de un conflicto que surgió sin querer entre ellas. Diez años después de la última vez que se vieron, la conmemoración de sus diez años de egresadas del secundario volverá a unirlas. Expectativas, ansiedad y nervios, serán los sentimientos previos al reencuentro. Mientras tanto, la autora nos sumerge con magia en la vida diaria de cada una de ellas. Laura, profesional, independiente y perfeccionista, pareciera tenerlo todo: el trabajo perfecto, el novio perfecto, la vida perfecta. Sin embargo, en un abrir y cerrar de ojos todo su mundo parece trastabillar y caer en el vacío. El novio la abandona y debe compartir el desarrollo de su más preciado proyecto laboral con su más odiado competidor. Nuevamente, las cosas demostrarán no ser lo que parecen cuando aquel que parecía el enemigo resulte ser su mejor aliado. Ana, aunque no soporte el título, es una ama de casa. No recuerda cuándo fue que se convirtió en esposa y madre abnegada tratando de sobrellevar los altibajos de su matrimonio y no renunciar a la concreción de sus sueños tantas veces postergados. Un presente insatisfactorio y anodino contrastado con un pasado de juerga y desenfreno pueden ser letales. Por último, Martina, una entusiasta e incansable romántica, buscará el amor en los sitios más insólitos. Cansada de esperar por el príncipe azul, tomará cartas en el asunto. Según vaya recabando información sobre dónde se reúnen los hombres, se inscribirá en cuanto curso, taller o actividad tenga noticia. Practicará deportes de alto riesgo con resultados desastrosos para su salud y visitará todos los after-office de la ciudad con la voracidad de una cazadora furtiva. Para volver, una y otra vez, a la triste soledad de su departamento. A la hora del reencuentro las tres han transitado caminos diferentes. Las cuentas pendientes, la envidia y el amor harán de este reencuentro algo inolvidable.