Inspirada en la Guerra Civil española y escrita en 1938, El agente confidencial reúne algunas de las escenas mejor resueltas de la novelística de Graham Greene y uno de los personajes que siempre le ha dado resultado: el pacifista obligado a tomar partido, el hombre acorralado e indefenso que debe enfrentarse a la injusticia en la más absoluta soledad. Sin ningún apoyo oficial, y con el enemigo pisándole los talones. El profesor de literatura que protagoniza esta novela deberá conseguir carbón para el gobierno republicano en una Londres a las puertas de la Segunda Guerra Mundial.