Sin ocultar su pasión por lo urbano, el arquitecto, como un ciudadano mas nos invita desde la simple lectura de unos textos a recorrer la ciudad desde en principio, simples paseos, para que descubramos por nuestros medios lo que de belleza, en particular la ciudad de Málaga, nos esconde. Con una doble intención, de una parte ese hecho nos lanza a desarrollar la propia mirada sobre lo cotidiano . De otra parte, como una cosa lleva a la otra, una cultivada manera de mirar nos va a llevar a plantearnos nuestras propias preguntas sobre lo que vivimos y vemos, preguntas que son la base del ocio más enriquecedor que podemos practicar en la ciudad de Málaga para después exportarlo a otras ciudades.