Después de cruzar el océano, un hombre y un chico llegan a un nuevo país donde se les asigna nombre y edad, y se los anima a olvidar su pasado. Extraños en una tierra extraña, aprenden español, el idioma del lugar, mientras aguardan a ser trasladados a la ciudad de Novilla, donde tienen la esperanza de encontrar a la madre del chico. Ya con sus nuevos nombres, Simón y David llegan al centro de reubicación de la ciudad. Allí, los tratan con educación, pero no son muy serviciales. Tras cierta confusión, Simón consigue un alojamiento para ambos y un trabajo en el puerto. Las tareas de estibador le resultan agotadoras, pero enseguida se gana el aprecio de sus compañeros, que durante los descansos mantienen diálogos filosóficos sobre la dignidad del trabajo. En este país nadie parece particularmente feliz o infeliz. Todos cumplen sus funciones, pero no van más allá y aparentemente no esperan ni quieren más de lo que tienen. En medio del desconcierto que le produce esta actitud, Simón decide retomar la misión de ubicar a la madre del niño, con una dificultad añadida: todos los que llegan al nuevo país parecen haber dejado atrás sus recuerdos. www.editorialmondadori.com www.megustaleer.com.ar