Pasen y lean. Verán algunas graciosas y otras trágicas historias de escritores que se volvieron locos, que buscaron musas imposibles o que, imbuidos de un cierto misticismo, se propusieron crear religiones o tuvieron encuentros con criaturas extrañas e incluso con su propio doble. Novelistas, filósofos, poetas o ensayistas tienen algún enigma o secreto que ofrecer respecto a sus vidas o a sus obras. A día de hoy aún hay polémica sobre dónde nació exactamente Cervantes o se conjetura que Conan Doyle fuese un asesino o que Molière no escribiera todas sus obras. Existen muchas preguntas que siguen sin una respuesta definitiva: ¿José Cadalso abrió la tumba de su novia? ¿Nerval fue el negro literario de Dumas? ¿Berbiguier fue martirizado por unos duendes? ¿Hubo alguna novela inspirada por el diablo? ¿Acaso Julio Verne pertenecía a una sociedad secreta? ¿Casanova vio un OVNI?Conocer aspectos novedosos y desmitificadores de Dickens, Rimbaud, Andersen o Simenon puede ser tan interesante como averiguar por qué Horacio Quiroga fue considerado un gafe o Emilio Salgari decidió poner fin a su vida haciéndose el harakiri. Sus cuentos y novelas palidecían al lado de sus propias existencias, muchas de ellas tan aventureras como la que le tocó vivir a Jack London que se abrió paso por la vida casi a mordiscos y a éxitos editoriales, a pesar de todas sus adversidades. Pasen y lean