Angelo DeGrasso es el Inquisidor General de Liguria. Su superior, el cardenal Iuliano y el astrólogo del Pontífice, Darko, le ordenan una misión especial. Deberá obtener del hereje Eros Gianmaria, preso en la cárcel de DeGrasso, una confesión sobre dónde oculta un libro prohibido, satánico, el Necronomicón, del que tras la destrucción sistemática del original y de todas las traducciones hechas en diferentes idiomas parece quedar una copia en italiano. Tras haber torturado, interrogado y quemado a Gianmaria para obtener esa confesión, Angelo deberá partir al Nuevo Mundo con una misión que se le desvelará durante el trayecto. A lo largo de su aventura, Angelo descubrirá una trama de conspiraciones que se enlazan entre ellas. Por un lado, la secta del Gran Brujo que pretende destruir el cristianismo, y para el que se ha conservado el libro; por otro lado, los masones de la Corpus Caria, una secta que intenta recuperar el libro prohibido y esconderlo de la Santa Inquisición; y por otro, el Vaticano mismo que conspira contra Angelo, a quien consideran un hereje potencial. El cardenal Iuliano no se equivoca puesto que Angelo, educado por los capuchinos es, en realidad, el elegido como sucesor del Maestre de la Corpus Caria desde que era pequeño.