Las travesuras llevan a Max a su habitación castigado y sin cenar. Encerrado entre esas cuatro paredes, imagina un viaje fantástic o al país de los monstruos, donde se convertirá en el rey. Un libro para aprender a domar monstruos (en este caso, de lo más entra ñables y tiernos). Ideal para los primeros lectores, quienes se verán identificados con Max, sus juegos, sus miedos, su mundo.