Visitar en cada verso un país nuevo.Tener la sensación de haber pilladoa Dios hurgando entre mis cosas llevopapel y lápiz por si hay olvidadoun verbo en la isla que nos dé cobijo.Tratar de entender la lluvia en el tamborde la ventana y esperar un día un hijoque nos cante las cuarenta. El favorlo hace siempre ella con su presenciaen los labios de una noche olvidaday cuando no aparece, malvivimos.Releerla para comprender su esencia,el camino que salió de la nada,la razón misma por la que vivimos.